La felicidad, comparada con la alegría, es como una pequeña lámpara eléctrica frente al sol. La felicidad siempre tiene un objeto, se es feliz por algo, es un sentimiento cuya existencia depende del exterior. Pero la alegría no tiene un objeto. Te posee sin ninguna razón aparente, en su ser se parece al sol, arde gracias a la combustión de su propio corazón.
Susana Tamaro
Donde el corazón te lleve
Muchas gracias por tus palabras. Siempre son una motivacion para un profe.
ResponderEliminarMuchos saludos
Vicente